El verano es sin duda la estación más cotilla, dormir cada noche con las ventanas abiertas hace que te enteres, sin querer, de las discusiones cotidianas que tienen tus vecinos, y eso es lo que pasó anoche.
Mientras intentaba conciliar el sueno y de forma inevitable, escuché a mis vecinos discutir a cerca de una almohada desaparecida, parecía un problema de mates: si había cuatro almohadas y ahora hay tres, ¿cuántas almohadas faltan?
"Mamá - decía la hija mayor - falta la que me gusta, a ver dónde está que si no no duermo."
"Papá - decía el pequeño con su media lengua - yo no la he escondido ni nada."
"Venga, a dormir." Decía el padre intentando descansar. Y mientras la madre, hecha un basilisco, buscando la p*** almohada.
La niña se vino arriba; " a ver qué pasa con esa almohada." Y la mamá por no darle un revés, clamo al cielo y se acordó de todas las almohadas y almohaditas del universo.
Al final Morfeo hizo su trabajo, y se hizo el silencio hasta que a las 4 de la mañana, mi vecino del tercero ha tenido su momento bollybood y me ha deleitado con una banda sonora típica de sus musicales.
Conclusión: este calor nos altera tanto, que se llega a discutir por una almohada y se hace partícipe de la jarana a todo el vecindario, hasta tal punto que un vecino decide poner banda sonora al momento almohada pero cuatro horas más tarde.
Mientras intentaba conciliar el sueno y de forma inevitable, escuché a mis vecinos discutir a cerca de una almohada desaparecida, parecía un problema de mates: si había cuatro almohadas y ahora hay tres, ¿cuántas almohadas faltan?
"Mamá - decía la hija mayor - falta la que me gusta, a ver dónde está que si no no duermo."
"Papá - decía el pequeño con su media lengua - yo no la he escondido ni nada."
"Venga, a dormir." Decía el padre intentando descansar. Y mientras la madre, hecha un basilisco, buscando la p*** almohada.
La niña se vino arriba; " a ver qué pasa con esa almohada." Y la mamá por no darle un revés, clamo al cielo y se acordó de todas las almohadas y almohaditas del universo.
Al final Morfeo hizo su trabajo, y se hizo el silencio hasta que a las 4 de la mañana, mi vecino del tercero ha tenido su momento bollybood y me ha deleitado con una banda sonora típica de sus musicales.
Conclusión: este calor nos altera tanto, que se llega a discutir por una almohada y se hace partícipe de la jarana a todo el vecindario, hasta tal punto que un vecino decide poner banda sonora al momento almohada pero cuatro horas más tarde.
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