Ayer por la tarde en Salvame, ese magnífico programa cultural en el que colaboran intelectuales de toda índole, su presentador Jorge Javier Vázquez, reconoció haber sido aficionado a los toros. Según sus comentarios, había acudido en más de una ocasión a disfrutar de las corridas celebradas en la Plaza de Toros Monumental de Barcelona, pero continuó diciendo que la afición a nustra fiesta la perdió una tarde de toros en la que ocupó una localidad en Las Ventas. Decía Jorge Javi que esa tarde vio a El Litri desatinar en repetidas ocasiones con los aceros y dejar al toro como un colador, por este motivo, el catalanísimo Jorge Javi dejó de ser aficionado, todo ello, según contó gracias a Miguel Báez.
Vale que El Litri sea un figurín del toreo, y que en mi época de estudiante de diseño de moda, me acordara de él a la hora de dibujar maniquíes masculinos, pero de ahí a ser el culpable de que a Jorge Javi ya no le parezca guay ir a los toros...¡Tela!
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